Según la Ley del Organismo Legislativo, los diputados son los representantes del pueblo. Por lo tanto, están llamados a pronunciarse ante las crisis políticas y sociales, como la que ha suscitado el actual proceso electoral. Sin embargo, los congresistas han preferido mantenerse al margen.
No han fijado postura frente a las voces que han intentado deslegitimar el proceso electoral del 25 de junio que dio como ganadores a Sandra Torres de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y a Bernardo Arévalo del partido Movimiento Semilla.
Panorama general. Los congresistas han volteado a ver hacia otro lado allanándose de su responsabilidad.
Algunos justifican que no han fijado posición en el hemiciclo debido a que no se han realizado sesiones. El último decreto aprobado fue el 19 de abril. No obstante, en las dos sesiones extraordinarias convocadas después del 25 de junio, muy pocos diputados asistieron y al final se suspendieron.
Otros aseguran que el silencio es resultado de la falta de liderazgo político, pues el interés de los legisladores está más enfocado en esperar al ganador de la segunda vuelta, que se realizará el 20 de agosto.
Qué destacar. Un grupo de diputados, en su mayoría afines al oficialismo, se reunieron con el secretario general de la OEA, Luis Almagro, para hablar sobre la tensión política y aprovecharon para señalar al Tribunal Supremo Electoral de ser el responsable de la situación.
La reunión se llevó a cabo por solicitud de Luis Almagro, quien según el diputado Manuel Conde, pidió la reunión directamente con él. Conde decidió incorporar a más diputados, entre ellos Anibal Rojas, Allan Rodríguez, Alexandra Ajcip y Sandra Orellana. Todos afines al partido de gobierno.
Voces (I). Armando Castillo, diputado y excandidato presidencial, consideró que, si bien cada congresista tiene una responsabilidad a lo individual, el Congreso es el lugar donde se deben debatir estos temas.
Castillo pensó que la Junta Directiva convocaría, pues el Congreso es el ente político por excelencia, pero no fue así. Recordó que la agenda de la última sesión giró en torno a las interpelaciones. “Es claro que no hay interés en la Directiva porque se conozcan estos temas”.
Por otro lado, espera que las sesiones no se vuelvan una batalla campal entre las dos opciones en contienda. “Son pocos los meses que quedan (...) para que se traten asuntos como el alto costo de la vida, aumento a combustibles y la falta de apoyo al campo”.
El diputado y excandidato presidencial del partido Vamos, Manuel Conde, no atendió las llamadas de República.
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